Beto Fantini, Raúl Villagrán, Pedro Fernández, Hernán González VS Alfredo Bruno. La Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados, popularmente conocida como “La Federación de la Carne”, que conduce José Alberto “Beto” Fantini, dispone de esta oportunidad. Aunque usted no tenga nada que ver con el oficio, ni desempeñe tarea alguna en el rubro cárnico, puede cumplir con el preciado sueño de tener su “sindicato propio”.

Esta, probablemente sea otra de las numerosas circunstancias, donde la realidad, supera a la ficción.

Hace un tiempo atrás, en la plataforma Netflix, se estrenó un largometraje llamado “El Irlandés”, en el film, se relata la historia de Jimmy Hoffa, un legendario dirigente de camioneros de EEUU, que desarrolló un imperio sindical y una organización mafiosa sin tener que manejar un camión en toda su vida. Recordemos que Hoffa, la única vinculación que tuvo con el transporte de cargas, fue, a muy corta edad y sin ser conductor, era lo que aquí llamaríamos estibador… cargador y descargador de mercaderías transportadas por camioneros en el territorio estadounidense.

La introducción tiene que ver con una situación, que mucho dista de la historia de Hoffa, pero que experimenta algunos puntos de contacto verdaderamente sorprendentes.

En los últimos tiempos, en la región de lo que otrora fue el Partido de General Sarmiento, se ha desatado una intensa “competencia gremial”, si vale la expresión, focalizada en el sindicato de la carne, esto es carnicerías, frigoríficos, mataderos, y en algunos casos hasta en “granjas” donde también los representantes gremiales intentar obtener la afiliación de los trabajadores.

¿De qué trata el nuevo escenario en esta lucha, por convertirse en los representantes gremiales de estos trabajadores, en la región de San Miguel, Malvinas, José C Paz y seguramente algún otro distrito del noroeste bonaerense?

Según nos informan trabajadores del sector, la Federación de la carne, distribuye las “representaciones gremiales” en las regiones, de un modo parecido a como funcionan las franquicias comerciales.

Esto significa, que otorgan la representación gremial casi como una herramienta comercial y no como suponemos que debiera funcionar una organización que defiende y representa a los obreros del oficio de la carne, frente a los abusos y las irregularidades patronales.

Desde hace unos años, en San Miguel funciona el sindicato SOFECA, (cuyo secretario general es el señor Alfredo Bruno), que obtuvo la posibilidad de instalarse y funcionar como organización gremial, con una inscripción gremial, que es una figura jurídica que no le otorga la condición de formalidad que sí aporta a un sindicato la obtención de la personería gremial.

Pero más allá de esta cuestión, si se quiere, casi técnica, aunque no menos relevante, ya que los aportes de los trabajadores, al no contar con la personería sólo son voluntarios y no compulsivos, como en el caso de las organizaciones gremiales que cuentan con dicho aval.

Lo que ahora convierte a este método, de obtener una representación sindical, otorgada por la federación, en una noticia, es que en los últimos días, surgió la intención por parte de nuevos “emprendedores” de solicitar el otorgamiento de una nueva filial.